Salsa Barbacoa al whisky


Vamos con una salsa que le sienta estupendamente a los asados de carne de cerdo, alitas de pollo o pizzas barbacoa. Se prepara en un momento y de una manera muy sencilla.
Resulta una combinación super interesante de sabores ya que el dulce, el ácido, el picante y el salado se fusionan con el umami procedente del tomate y de la salsa Worcestershire (que en su elaboración lleva pasta de anchoas) hasta formar una mezcla impactante para nuestro paladar.






Hay un montón de recetas de salsa barbacoa, iremos preparando diferentes, esta como rasgo destacable y diferenciador es que lleva una cantidad considerable de whisky entre sus ingredientes. Lo que la hace muy sabrosa y super aromática.

Tan sumamente aromática que puede que al principio, cuando la estéis cocinando, os parezca que la mezcla es demasiado potente y que no os termina de convencer. Incluso es posible que os arrepintáis por un momento de haberme hecho caso, pero después cuando enfríe y la probéis con un trocito de cinta de lomo asada, unas costillas o unas simples patatas fritas, veréis como os encanta.
Creo que hasta es adictiva, avisados quedáis jajajaja.

Además os sentiréis inmensamente orgullosos de haberla hecho cuando os feliciten por su sabor y os pregunten ¿Qué marca de salsa barbacoa usas?
Merece la pena probarla, confiad en mi.



INGREDIENTES

· 150 gr de cebolla
· 40 ml de aceite de oliva virgen extra
· 100 ml de whisky
· 250 gr de salsa de tomate (mejor si es casera)
· 30 ml de zumo de limón
· 50 ml de zumo de naranja
· 50 ml de vinagre de Jerez
· 60 ml de agua
· 80 gr de miel
· 50 ml de salsa Worcestershire (Perrins)
· 1 cucharadita de café de sal 
· 2 cucharaditas de café de azúcar moreno


ELABORACIÓN


1. Picamos la cebolla y la sofreímos en una cazuela o sartén alta con el aceite hasta que comience a tomar color.

2. Agregamos el resto de los ingredientes y cocinamos a unos 25-30 minutos a fuego medio suave.

3. Transcurrido ese tiempo probamos por si hiciera falta corregir el punto de sal, el toque dulce o la acidez.
Retiramos del fuego y dejamos templar.

4. Vertemos en el vaso de la batidora y trituramos hasta conseguir una salsa de textura fina.

5. Cuando está completamente fría la ponemos en un bote hermético y guardamos en la nevera.
Debido a la cantidad de azúcares y vinagre que lleva se conservará sin problema más de una semana. Aunque seamos realistas, está tan rica que no creo que os dure tanto.



¡ESPERO QUE OS GUSTE!

Fuente de la receta: propia.



2 comentarios:

carmen - Rezetas de Carmen dijo...

Que original, tiene una pinta espectacular!!

Belen dijo...

Como lo casero no hay nada. Tiene que quedar la carne riquísima con ella.
Bss