La fresquera del siglo XXI se llama Fizpilar®

En este post no vais a encontrar tecnología punta pero si mucho sentido común y practicidad a la hora de desarrollar un producto novedoso pero que al fin y al cabo se inventó hace siglos.



Hoy os cuento mi experiencia con Fizpilar®, un sistema de conservación natural para nuestras frutas, verduras, pan, queso e incluso tabaco que emula a las tinajas (cuyo uso se remonta hasta la Edad de Bronce, ahí es nada...) ya que se basa practicamente en los mismos principios de conservación, es decir, porosidad y transpiración. Eso si, ni que decir tiene que de una forma más eficaz, cómoda e higiénica que las vasijas de aquella época.
La función termo reguladora de este recipiente de cerámica sin esmaltar hace que los alimentos maduren y se conserven potenciando al máximo su textura y sabor.
Esta fabricado con materiales ecológicos, 100% reciclables y altamente porosos que evitan la formación de moho y hongos.



Ahora y ante todos vosotros juro a lo Scarlett O'Hara que nunca más volveré a comer la fruta helada e insípida (por la acción del frío) recién sacada de la nevera jaja.
Las fresas me vuelven loca y estoy deseando que llegue la temporada (¡Madre mía, no queda nada que digamos!) para poder poner a prueba el potencial de Fizpilar® y comerlas en todo su esplendor.
También podemos usarlo como pequeña bodega para conservar ese vino que merece que le mimemos si nos hemos dado un capricho o nos han hecho un regalo especial.



Existen diferentes lineas para  productos tan distintos como quesos y bizcochos o puros. Podeís consultarlo en su web.
Además podemos usar su tapa de madera como tabla de corte (siempre por la parte interior para no estropear la cara visible) y meterlo en el lavavajillas sin problema cuando necesitemos limpiarlo.
De momento para mi todo son ventajas.

Aquí tenéis un vídeo que os ayudará a conocerlo mejor si os interesa profundizar en este sistema de conservación natural.




¡ESPERO QUE OS GUSTE!

Por cierto os dejo y me voy corriendo a comprar el pan a ver si se conserva como espero dentro de Fizpilar®, ¡Eso si que sería una verdadera revolución en mi cocina!.



3 comentarios:

Sylvie Tartán dijo...

¡¡Genial el invento y genial el post!!

Mar Izquierdo dijo...

Gracias por compartirlo, no tenía ni idea de éste artículo y me parece muy interesante!

Francisco Gil Menezo dijo...

Interesante artículo