Un plato indispensable en mi recetario de otoño e invierno ya que es un guiso sencillo pero muy resultón. Además siempre es buen plan acercarse al Mercado de La Esperanza pronto y pasear su interior para comprar congrio bien fresco y preparar este tradicional guiso.
Te animo a probar esta receta porque es una forma estupenda de comer sano y rico a un precio muy económico o lo que es lo mismo, practicar el 'cuchareo' de manera inteligente aprovechando los recursos que los mercados nos ofrecen según la temporada y la zona donde nos encontremos.
INGREDIENTES:
· 4-6 patatas (depende del tamaño)
· 800 g de congrio fresco
· 1-2 dientes de ajo
· 1/2 cebolla pequeña
· Un poquito de polvo de ñora o de pimiento choricero*
· Unas hebras de azafrán
· 1/2 vasito de vino blanco
· Aceite de oliva virgen extra
· Fumet o caldo de pescado que habremos preparado con las espinas, parte cerrada y/o cabeza del congrio
· Sal
· 800 g de congrio fresco
· 1-2 dientes de ajo
· 1/2 cebolla pequeña
· Un poquito de polvo de ñora o de pimiento choricero*
· Unas hebras de azafrán
· 1/2 vasito de vino blanco
· Aceite de oliva virgen extra
· Fumet o caldo de pescado que habremos preparado con las espinas, parte cerrada y/o cabeza del congrio
· Sal
· Perejil fresco
ELABORACIÓN:
1. Pon tres cucharadas de aceite de oliva en una cazuela, lleva a fuego medio y pocha la cebolla y el ajo picado lo más fino posible.
2. Cuando veas que la cebolla está transparente incorpora las hebras de azafrán, aproximadamente media cucharadita de polvo de ñora* y las patatas (peladas, lavadas y chascadas en trozos no demasiado pequeños), rehoga un par de minutos e incorpora el vino blanco, sube un poquito el fuego para que se evapore el alcohol. Mantén, moviendo constantemente con una cuchara de madera, durante un minuto más.
3. Sazona a tu gusto, vierte el caldo (añadirlo caliente es un buen truco para no interrumpir bruscamente el proceso de cocción) hasta cubrir al menos un dedo por encima de las patatas, coloca la tapa y deja que se cocine a fuego suave durante 15 minutos.
4. Destapa, pon los trozos de congrio (que sean de la parte abierta, que estén completamente limpios de piel y espinas y cortados del tamaño de un bocado) y deja cocinar a fuego suave durante 5 minutos más.
5. Retira del fuego, prueba para cerciorarte de que el punto de sal es el correcto y si observas que el caldo no está lo suficientemente ligado, puedes sacar 3 ó 4 trocitos de patata, aplastarlos hasta conseguir un puré y añadir de nuevo al guiso, este pequeño truco ayudará a que 'engorde' la salsa.
Deja reposar 3 o 4 minutos antes de servir espolvoreado con una pizca de perejil fresco picado finamente.
2. Cuando veas que la cebolla está transparente incorpora las hebras de azafrán, aproximadamente media cucharadita de polvo de ñora* y las patatas (peladas, lavadas y chascadas en trozos no demasiado pequeños), rehoga un par de minutos e incorpora el vino blanco, sube un poquito el fuego para que se evapore el alcohol. Mantén, moviendo constantemente con una cuchara de madera, durante un minuto más.
3. Sazona a tu gusto, vierte el caldo (añadirlo caliente es un buen truco para no interrumpir bruscamente el proceso de cocción) hasta cubrir al menos un dedo por encima de las patatas, coloca la tapa y deja que se cocine a fuego suave durante 15 minutos.
4. Destapa, pon los trozos de congrio (que sean de la parte abierta, que estén completamente limpios de piel y espinas y cortados del tamaño de un bocado) y deja cocinar a fuego suave durante 5 minutos más.
5. Retira del fuego, prueba para cerciorarte de que el punto de sal es el correcto y si observas que el caldo no está lo suficientemente ligado, puedes sacar 3 ó 4 trocitos de patata, aplastarlos hasta conseguir un puré y añadir de nuevo al guiso, este pequeño truco ayudará a que 'engorde' la salsa.
Deja reposar 3 o 4 minutos antes de servir espolvoreado con una pizca de perejil fresco picado finamente.
*para tener siempre a mano ñora o pimiento choricero listo para usar tengo un truco desde hace años que me funciona estupendamente, te cuento; compro las ñoras o pimientos choriceros, retiro el pedúnculo y las semillas, trituro con la ayuda de un molinillo eléctrico de café hasta conseguir pulverizarlo y lo guardo en un bote hermético.
Resulta una forma súper sencilla de tener siempre a mano 'carne' de pimiento choricero o de ñora, únicamente hay que poner una pequeña cantidad en el sofrito del guiso y listo.
Resulta una forma súper sencilla de tener siempre a mano 'carne' de pimiento choricero o de ñora, únicamente hay que poner una pequeña cantidad en el sofrito del guiso y listo.
¡Espero que te guste!
Fuente de la receta: propia.