Antes de comenzar os diré que si estáis a dieta no continuéis leyendo esta receta, sería torturarse de una forma innecesaria, os lo digo por experiencia...
INGREDIENTES
·Salchichas frescas
·Puré de patata en copos
·Salsa de tomate casera (receta aquí)
·Leche
·Harina
·Aceite de oliva virgen extra
·Mantequilla
·Queso parmesano rallado
·Orégano
·Sal
·Una pizca de curry
·Una pizca de nuez moscada
ELABORACIÓN
1º- Freímos las salchichas y cuando están doradas las sacamos a un plato cubierto de papel de cocina para que dejen allí el exceso de grasa. Reservamos
2º- Hacemos el puré siguiendo las indicaciones del fabricante (por supuesto podemos hacerlo casero cuando disponemos de más tiempo y quedará delicioso), en mi caso eché 800 ml de leche en un cazo, añadí un poquito de sal, una pizca de curry y una cucharada de aceite de oliva. Llevé a ebullición y retiré del fuego, dejé reposar 2 minutos y añadí la bolsita de puré, removí con unas varillas rápidamente hasta que espesó. Debe quedar un puré de patata de consistencia bastante firme ya que será la base de nuestro pastel.
3º- Extendemos el puré de patata en una fuente apta para horno que habremos "barnizado" ligeramente de aceite con una brocha de silicona o como en mi caso pulverizado con un poquito de spray desmoldante. Alisamos la superficie.
4º- Cubrimos de salsa de tomate y espolvoreamos con un poquito de orégano.
Colocamos las salchichas que teníamos reservadas.
5º- Cubrimos con la bechamel, hacerla es muy sencillo, tan solo debemos poner en una satén antiadherente mantequilla y aceite de oliva, cuando esté derretida la mantequilla incorporar la harina y mover para que se cocine un poco y después no sepa a cruda. Mover con unas varillas e ir añadiendo la leche hasta conseguir la textura deseada, es importante NO parar de mover para deshacer los grumos.
Dejamos cocer a fuego bajo durante unos 15 minutos, moviendo regularmente.
Echamos la sal y una pizca de nuez moscada y listo.
6º- Vertemos la bechamel sobre el pastel y rallamos queso parmesano por encima.
7º- Gratinamos unos minutos hasta que esté dorada la superficie y listo para disfrutar.
¡ESPERO QUE OS GUSTE!
Notas
Podéis hacer porciones en moldes de aluminio pequeños* y congelarlo para ir sacando a medida que lo necesitéis. En el último momento sacáis la porción del congelador y metéis al horno primero a temperatura suave, pincháis con una brocheta y cuando veáis que se ha descongelado subís la temperatura para terminar gratinando la superficie.
*los venden de diferentes tamaños en los bazares orientales, seguro que encontráis el que mejor os venga.
Fuente de la receta: propia.
10 comentarios:
Por supuesto que me gusta y por supuesto que estoy a dieta (esto último es continuo) pero como puedes pedir que nos resistamos con esas pinta!!
Un besito desde Las Palmas
Que receta más rica nos compartes, está buenísima, un beso
Como tengo todo lo necesario ya la estoy preparando para comer.Seguro que es un éxito ya te contare.Un beso.
Una receta bien barata y por los ingredientes que lleva rica, rica...eso si de dieta tienes razón que no es jajaja
rico pastel
Ha sido un éxito,a mis niños les ha encantado.
Aun así merece la pena leerla, para saltarse la dieta algún que otro día jaja.
Buen finde
O.O yo no estoy a dieta así que me lo llevooo!!! qué rico! besosss
Gema
Y tanto que me gusta, te ha quedado un pastel buenísimo y que gusta a todo el mundo seguro.
besos
realmente la pinta lo dice todo!
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