El repentino idilio que vivo con las berenjenas es fruto del descubrimiento de recetas como esta, extremadamente fáciles, sorprendentemente ligeras y por supuesto deliciosas.
Acostumbrada a ver a la berenjena como "esa especie de esponja capaz de absorber todo el aceite que le pongas por delante", descubro hace unos meses que la probrecita morada se adapta a la ausencia de materia grasa de una manera extraordinaria jajajajajaja.
Un ejemplo de ello son estas mini pizzas con base de berenjena, que están riquísimas y además no contienen gluten.
[pincha en la foto para ampliar la imagen] |
Pero más allá de que seas celiaco o no (o alguien de tu entorno lo sea), tienes que probar la receta.
Estas mini pizzas con base de berenjena te van a encantar. Son un bocado delicioso, ya que su piel no resulta áspera para nada y su sabor es idéntico al de la mejor pizza que puedas imaginar.
Incluso si la berenjena y tú jamás os llevasteis bien tienes que animarte a probar esta receta.
INGREDIENTES
· 1 berenjena grande
· Tomate frito o salsa boloñesa (mejor si son caseros)
· Queso mozzarella rallado
· Orégano
· Pimienta negra recién molida
· Sal
· Albahaca fresca
ELABORACIÓN
1. Lava y seca la berenjena. Pártela en lonchas de un dedo de grosor (1.5 ó 2 cm). Colócalas sobre la tabla de madera, que habrás cubierto de papel de cocina, espolvorea sal por encima y deja que reposen durante al menos 30 minutos.
2. Saca la bandeja del horno y precalienta a 180º (arriba y abajo, sin aire).
3. Forra la bandeja con papel de horno, coloca las rodajas de berenjena (que a estas alturas habrán perdido la mayor parte del líquido que contienen por efecto de la sal) sobre la bandeja y espolvorea con pimienta negra.
4. Lleva al horno durante 30 minutos, temperatura 180º.
5. Transcurrida la media hora saca del horno, pon salsa de tomate o boloñesa casera sobre cada rodaja de berenjena (un par de cucharadas por mini pizza serán suficientes), espolvorea con orégano, cubre con queso mozzarella y lleva al horno de nuevo, esta vez durante unos 10 ó 12 minutos. O el tiempo necesario para que se funda el queso y adquiera un ligero tono dorado o gratinado.
3. Forra la bandeja con papel de horno, coloca las rodajas de berenjena (que a estas alturas habrán perdido la mayor parte del líquido que contienen por efecto de la sal) sobre la bandeja y espolvorea con pimienta negra.
4. Lleva al horno durante 30 minutos, temperatura 180º.
5. Transcurrida la media hora saca del horno, pon salsa de tomate o boloñesa casera sobre cada rodaja de berenjena (un par de cucharadas por mini pizza serán suficientes), espolvorea con orégano, cubre con queso mozzarella y lleva al horno de nuevo, esta vez durante unos 10 ó 12 minutos. O el tiempo necesario para que se funda el queso y adquiera un ligero tono dorado o gratinado.
6. Saca del horno, remata cada mini pizza de berenjena con una cantidad generosa de albahaca fresca partida en juliana, sirve y disfruta.
¡Espero que te guste!
- Consejos -
· La salsa de tomate que elijas debe ser espesa para que aguante sobre las bases de berenjena sin desparramarse durante la cocción.
· Si quieres usar boloñesa pero no tienes tiempo para cocinarla o simplemente no tienes ganas de hacerla, puedes comprarla hecha. Existen marcas bastante decentes en el mercado, no es lo mismo pero hacen el apaño.
· No escatimes en la cantidad de albahaca, juega un papel fundamental en el éxito de este plato.
Fuente de la receta: propia.
2 comentarios:
Que rica y original idea.
Me encantan! Alguna vez lo he hecho con base de patatas, o con la base típica de coliflor que tan buen resultado da...
Publicar un comentario